Tras un mesecito en Ciudad Merliot, llegó la hora de la despedida y que mejor que una tortilla de patata para hacerlo! No decimos adiós a nuestro aitite Rene y amama Ketty sino un hasta pronto!!Volveremos algún domingo que otro!
Elaborando la deliciosa tortilla de patata, no dejamos de innovar...y es que para gustos están los colores! Nuestra compi Vero detesta la yema así que he ahí el resultado.
Txan-txan!!!ummmm...Para chuparse los dedos!!Qué ilusas...No sabíamos lo que esa noche nos esperaba...
Penitencia anticipada:
Terminar de hacer la tortilla y darnos cuenta de que no había suficiente para tod@s, ceder era la única solución. Mientras observabamos un pedacito reservado para Luis (el hijo de Vero) que aún no había llegado, nos tuvimos que conformar con esos espaguetis.
Sin embargo, la tentación era demasiado fuerte y no pudimos evitar que un mini trocito pasara por nuestro paladar. Nunca una tortilla de patata nos supo tan rica!!!
De todas formas, como bien dice el refrán, la esperanza es lo último que se pierde. En un momento de lucidez un recuerdo iluminó nuestra sonrisa: el maravilloso jamón Ibérico procedente de la villa bilbaína, se hallaba en nuestra nevera!!
Muchas Gracias Carmentxu!!!
Ainho, me gusta mucho cómo escribes. Habrá que pensar en escribir cuentos o novelas. Me pido ser tu representante. Muy bien contado, sí señor. Un abrazo.
ResponderEliminarTendrás que representarnos a las dos porque escribimos en equipo, así que ya vamos pensando en la trama de la futura novela! Muchas gracias por el cumplido Marie!!Un abrazo muy grande!!
ResponderEliminarCuando volvais, un viernes en artxanda podeis tener para comer media tortilla para cada una. Un abrazo
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